El paseo de Valmojado

Tras mucho tiempo sin "saltar" el Guadarrama y con mucha Sagra por conocer al oeste del río, una pequeña expedición decidió recorrer los caminos mas allá de las Cárcavas y lanzarse a la conquista de Valmojado.
El punto de retorno fué La Iglesia parroquial de Santo Domingo de Guzmán; Aunque fue reformada y ampliada en la última centuria, el edificio primitivo data de finales del siglo XV y principios del XVI.

Crónica El Paseo de Valmojado
por Maroto

09:30h. La mañana despertó fresca pero soleada. Luís, fiel a su estilo, se entretenía en los ajustes mecánicos de la bici del “Marqués”, que llegaba en su Astra rojo a mesa puesta.

Salimos pedaleando de Illescas por el camino de El Viso. Rincón viene con hambre de kilómetros y asume el rol de liebre sin pegas. Un despiste nos obliga a cruzar parte del casco urbano y recorrer la carretera rumbo sur hasta escasos metros de Cedillo, donde nuevamente cogemos tierra en un viraje de noventa grados a poniente.

A pesar de la escasa lluvia de la semana, las nubes y la humedad no habían dejado secar bien el terreno que se iba a poner muy juguetón. Me cae el marrón de abrir ruta y Alfredo decide plagiar mis trazadas en un error claro. Los charcos son frecuentes aunque poco profundos y el barro no llega a borrar el dibujo de nuestras ruedas, con lo que el paparazzi se queda sin material por el momento.

Un par de taponazos cinegéticos próximos aceleran automáticamente nuestra cadencia hasta Palomeque. Luís se pone en cabeza para guiarnos por el camino asfaltado del mismo nombre, que nos saca a la Fortaleza de Olmos, donde comenzamos a perder cota bruscamente ante la proximidad del valle del Guadarrama. En el vado del río, nos encontramos con un mercadillo local donde no perdemos de vista los plátanos de uno de los puestos. Con poca comida y menos dinero tiramos de improvisación ya que nadie había estudiado la ruta con detenimiento. 

 

 

Nuestra intuición nos hace atravesar cuesta arriba la urbanización de Huertas donde trato de dar un hachazo al grandullón, que se muestra intratable. Cogemos un camino poco transitado que la vegetación ha comenzado a borrar pero que no tarda en mejorar para recorrer varios kilómetros de lomas suaves. Sin orientación en el horizonte conseguimos salir a Casarrubios del Monte. Un rebaño de ovejas y una torre bien conservada nos reciben en la entrada del pueblo.

Continuamos hacia nuestro destino, distancia que aprovecho para ir llenando la panza a caraperro. En Valmojado, fotos de relleno en la iglesia y en la plaza del ayuntamiento y camino de vuelta, en el que Luís hace caer a Rincón en un banco de arena (esta bastante torpe desde que va a volver a ser papa).

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La subida a la Fortaleza de Olmos hace mella en Alfredo, que ya no tiene más glucosas, y en Cedillo acortamos por la vía de servicio de la CM-41 hasta el polígono de Yuncos. Por ahorrar metros e ir pensando en la excusa que le iba a dar Paqui por llegar tarde, me meto en un barrizal de los buenos casi llegando al cuartel, donde me despido de mis compañeros por última vez en el año.

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Distancia Aprox: 65 Km.
Dificultad: Media-Alta

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