El recorrido era exigente, continuos desniveles y kilómetros de más que nos llevaron a cruzar el Guadarrama a la altura de la Torre de Olmos; Mal día para debutar.
Y es que todos hemos tenido nuestro Bautismo de fuego.
Crónica Bautismo de fuego
por Damián
La mañana se presenta soleada y la temperatura agradable. Cinco componentes forman el grupo: Luis, Rincón, Morillo, Damián y Mario (valiente e inédito hasta la fecha en nuestras expediciones). La intención es hacer entre 50 y
Iniciamos la ruta por el camino de Nuevo Toledo, con dirección a Cedillo del Condado.
El viento, compañero de viaje en anteriores jornadas por
esta zona, se muestra perezoso en esta ocasión, lo que nos permite conversar
sin tener que dar gritos. Únicamente nos interrumpen los disparos de las
escopetas de los cazadores, despertando en nosotros cierto recelo (ya se sabe
las carga el diablo).
De Cedillo tomamos el camino hacia El Viso, entrando momentáneamente en esta población por el camino de la piscina y haciendo frente al famoso repecho que parte de la misma. Mario, impasible hasta el momento, se resiente de la dureza de la subida, pero aguanta estoicamente. Así que aprovecha la bajada por el Camino del Batán hacia las urbanizaciones para dar merecido descanso a las piernas.
Y es precisamente en la urbanización Batán donde cogemos el paso hacia Castillo del Olmo. Se trata de una pequeña bajada de considerable exigencia técnica, quizá excesiva en la parte final, la cual nos lleva a un pequeño arroyo, por lo que tenemos que poner pie en tierra (es demasiado pronto como para continuar el resto de la ruta empapados).
A Castillo del Olmo entramos por su parte más baja por lo que tenemos que atravesar toda la urbanización por una recta de unos dos kilómetros y una pendiente endiablada, para cruzar por debajo de la CM4004 bordeando las ruinas de la fortaleza de Olmos, descendiendo hasta cruzar el Guadarrama a la altura de la urbanización San Marcos.
En este punto iniciamos un tramo de varios kilómetros de llano en paralelo al cauce del río, cuya mayor dificultad son dos arroyos que atraviesan el camino, los cuales nos vemos "obligados" a cruzar (porque no decirlo, sacando pecho al coincidir en estos con otros grupos de bikers menos arriesgados je je).
El final del camino nos deja a los pies del Monte de Batres. Aprovechando el merendero como punto de avituallamiento tratando de reponer fuerzas. Continuamos la marcha subiendo por una zona de trialeras que nos llevan directamente a Batres. Mario nos comenta que tiene ya las piernas muy castigadas, pero una vez que llegamos a El Tejero para adentrarnos en Carranque, ya es prácticamente llano.
Nuestro fugaz paso por Carranque nos dirige hacia la urb.
Villarreal de El Viso, donde giramos por el camino de La Tenería con dirección
a Illescas.
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Distancia Aprox. 55 Km.
Dificultad: Media
Otro fichaje que promete. Anímate La Sagra te espera.